Seguidores

Salidas Navideñas


Domingo 23 de Diciembre.

Salida de pesca a corcho con mi compañero de profesión Jesús, nada mas salir de casa, note que hacia mucho viento,  pero con todo lo que nos había costado coincidir un día para ir a pescar no era plan de anular la quedada, así que procuramos buscar un sitio que con esas condiciones de mar y con el viento que había nos permitiese estar a gusto.  Nada mas bajar echamos la caña y enseguida hicieron acto de presencia, Jesús de mostro muy buenas actitudes en este arte, claro esta que lleva muchos años practicando la pesca, con diferentes modalidades, la pesca fue escasa pero hicimos todo lo que pudimos ya que el viento en ocasiones no nos permitía ni sujetar  la caña y poco a poco se fue poniendo el mar como un tiro, aun así no dejamos de pasar una mañana entretenida y en muy buena compañía,  fue un placer para my pasar la mañana  con Jesús.




Martes 25 de diciembre

A pesar del día que era tan señalado, mire la mar  que iba hacer y seme paso por la mente escaparme para darle un ratito al spinning, en cuestión de minutos me llama my compi Ibai y me comenta que estaba pensando en hacer una salida, y como no necesitamos mucho para animarnos pos decidimos hacer una escapadita.

Sin ver la mar nos arriesgamos a bajar a un pedregal que nos gusta, llegamos justo al amanecer justo en el cambio de marea, al de media hora tuve un clavada de una preciosa lubina, la clavada me sorprendió un poco, ya que el señuelo se me paro en seco, al principio pensé que seria  una lubina pero no tiraba en ningún momento y me dije pos será una roca y al poner mas tenso y tirar hacia mi me pego una buena arrancada y le dije a Ibai es una lubina, poco a poco la fui trayendo pensando que seria una lubina de menor tamaño, cuando estaba debajo nuestro no se la veía y dado que en el sitio que nos encontrábamos era  bastante complicado echarle mano, decidimos intentar meterla a un canal que teníamos detrás nuestro y con la ayuda de Ibai la pusimos en seco, cuando la vimos nos sorprendió bastante pues no pensábamos que seria de ese tamaño dio un peso de 4.3 kg. Una preciosa lubina para comer con la familia. Ibai al de 5 minutos tubo una clavada de una lubineta que aunque daba la taya decidió soltarla pues ya estábamos satisfechos.



  
Aquí mi primo Borja con la lubina, antes de limpiarla